martes, 14 de septiembre de 2010

EL CALIPSO COMO BAILE


A mediados del siglo XIX, en las islas antillanas, en el mar Caribe, se vivía la liberación de la esclavitud. Mientras, en Venezuela, se daba la concesión de la explotación del oro a ingleses y franceses. En Venezuela, la zona minera más importante se encontraba antes y ahora en el estado Bolívar, al sur del país.

Para ese momento, la fiebre del oro atrajo una gran cantidad de inmigrantes, en especial de las antillas británicas y francesas, quienes se radicaron en la población de El Callao. Esta región se convirtió en el escenario de la mezcla de diferentes culturas, entre las que destacan junto a los habitantes de origen local, un grupo de ingleses, norteamericanos, franceses y oriundos de las Antillas británicas y francesas, entrelazando costumbres, hábitos, música, canto y lenguaje. De esta mezcla surgieron ricas tradiciones, con el aporte afro-antillano; ejemplo de ello es el Calipso y el Patua.

La intención de este trabajo es compartir elementos característicos de la cultura venezolana, a través de sus danzas. Entendiendo que la danza/ el baile, como cultura popular, es la expresión artística constante en la idiosincrasia de Venezuela. Al mismo, tiempo este trabajo intenta recoger parte de las características del Calipso como genero musical Afro -antillano /Afro-americano, el cual asumió instrumentos y ritmos musicales que le dieron una identidad particular; como muestra de la danza alegre y rica en expresión de sentimientos y como teatro de calle, ambos elementos populares de la región.

Con el propósito de presentar una visión general de la cultura y el folklore de la región minera del país, muestra de la herencia étnica-cultural de los venezolanos; se siguió una investigación documental, donde la experiencia personal se entrelaza como parte de la realidad étnica que caracteriza el sincretismo sociocultural de Venezuela. Adicionando también, la información obtenida como parte de la transmisión oral que es lo que a permitido recoger los cimientos de esta tradición cultural.

Finalmente, se intenta mostrar el proceso a seguir para enseñar Calipso de una forma sencilla, fluida y coherente, asegurando un entrenamiento aeróbico, para ser implementado en las clases de Educación Física en las escuelas de I y II etapa de Educación Básica. (Primary school).

El folclore venezolano presenta una diversidad de manifestaciones que reflejan su cultura e identidad. Entendiendo que folklore es una palabra de origen inglés, compuesta por Folk pueblo y lore que significa saber. De acuerdo con Aretz (1980) que fue utilizado por W. J. Thoms para referirse a literatura popular, antigüedades populares que relacionó con usos, costumbres, ceremonias, supersticiones, baladas, proverbios, entre otros. Para el, lo folklórico es parte de la cultura y se transmite de una generación a otra debido a que su origen se remonta a un culto, manifestación popular o tradición aborigen. De allí que las manifestaciones populares, así como su gente, están presente en las celebraciones, bailes, cantos, ritos y tambores que reflejan un sentimiento colectivo. Cada una con significado especial como muestra del sincretismo religioso, social y cultural característico de esta nación.

En Venezuela se interpreta el Calipso en la zona oriental del Estado Sucre, Nueva Esparta, Monagas, Bolívar y en Ciudad Guayana bajo la modalidad de Steel-Band, motivado a la influencia fronteriza, la utilización de mano de obra antillana en la explotación petrolera y en la industria del hierro. Tal y como lo expresan los participantes del Grupo 'Yuruari':

Los emprendedores antillanos que llegaron a Venezuela atraídos para trabajar en las minas y búsqueda de oro entraron por el río Yuruari, específicamente vinieron pobladores de las islas antillanas que estaban colonizadas por franceses y posteriormente los ingleses. Este grupo de inmigrantes trajeron sus creencias, costumbres, cantos y ritmos, y entre ellos lo que conocemos como el calipso el cual es una canción y baile a dos tiempos originario de Jamaica (Fundación Bigott, 1995).

Cuando se inicia la inmigración de mano de obra calificada, traída por las compañías inglesas y francesas que habían obtenido la concesión de explotación de oro, surgió el problema del idioma entre los técnicos y el personal obrero; para resolverlo se trasladó personal de Las Antillas anglo y franco parlantes, quienes junto a sus familias trajeron un sin numero de costumbres y necesidades que luego añadieron a la región.

Para ese entonces, el atractivo que ejercía la explotación del oro y la posibilidad de lograr una rápida riqueza, hizo que El Callao se convirtiera en el escenario de la mezcla de las culturas: inglesa, norteamericana, francesa, antillanas, con la cultura mestiza ya nativa de la región. Obviamente de este intercambio cotidiano emergieron tradiciones con una clara distinción del aporte afro-antillano. Entre ellas el lenguaje, el carnaval y el Calipso.

No hay comentarios:

Publicar un comentario